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LOS FANDANGOS (1): Introducción y origen

Publicado por : elmorante.es a : miércoles, 26 de julio de 2023 0 comentarios
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En Calañas

Sabemos de la gran afición que existe en nuestro pueblo a los fandangos, por lo que considero una tropelía por mi parte el atreverme aquí a hablar de ello, máxime teniendo como tenemos en Calañas un maestro conocedor de este arte, Gonzalo Clavero, que además de cantaor, guitarrista, estudioso y letrista, fue el recuperador de nuestro Fandango original de Calañas, además de crear, sobre la base de este, un estilo que hay que denominar Fandango de Calañas al estilo de Gonzalo Clavero. Si además de todo lo anterior, contamos en Calañas con varios cantaores (Francisco Jiménez el Maestrillo, Manuel Sánchez Quinino, …) y unimos a todo esto la tradición letrista del pueblo (recordamos además de a Gonzalo, a Eloy Núñez, a Benito Ramírez, a Miguel García Tacón -con un libro editado de letras de fandangos-) entonces la tropelía se convierte en atropello.

 

 

Gonzalo Clavero: Libro de letras de fandangos y Fandango de Calañas en su estilo personal (Canta, Gonzalo; Guitarra, Manolo Azuaga)

 

Por tanto, ante todo, disculpas anticipadas por los posibles errores en los que podamos caer, que trataremos de corregir si se nos indican. 

Esta serie, que hoy iniciamos, pretende repasar detalles, creemos que poco conocidos, de los diversos estilos de los fandangos de nuestra tierra, amén de otras pequeñas cosas sobre el tema.

Pequeña introducción

Según la RAE, el fandango es un

    Antiguo baile español, ejecutado con acompañamiento de canto, guitarra,     castañuelas y hasta de platillos y violín, a tres tiempos y con movimiento        vivo y apasionado.

Parece que no hay mucha controversia sobre este asunto, y así vemos que todavía hay pueblos en los que se sigue casi al pie de la letra esta definición. Por ejemplo, en Huelva, Encinasola y Almonaster, en Málaga, la malagueña original, las verdiales, etc

Por tanto, inicialmente era baile acompañado de cante.

Algunos apuntes sobre el origen

Sobre este asunto se cierne una gran nebulosa, ya que hay diversas teorías, que son, sólo eso, teorías.

Vamos simplemente a apuntar algunas

  • Una teoría nos dice que es de origen indiano (afroamericano)
    • Sufijo ango y/o ngo
    • Vocablo de la lengua mandinga fanda = convite
    • Lo que nos lleva a algarabía, jaleo, fiesta (fanda-ngo)

Desde las estancias de los esclavos y trabajadores en las haciendas coloniales, es muy posible que pasara a los salones nobles en la España colonial. Alguna señora hacendada lo empezó a usar en sus salones y se extendió por otras haciendas y casas señoriales. De las colonias vino a España, a los salones nobles de la península y de ahí al pueblo llano.

 

Baile formal del fandango en un salón. Música de Luigi Boccherini.

Hoy se cantan por coros de negros unas tonadas en la ciudad de Trinidad llamadas fandangos (Linares Savio, 1998) y Manuel Garrido Palacios, 1992, nos comenta “que fueron de Alosno los primeros pobladores que le dieron auge a la ciudad de Trinidad”. Trinidad fue fundada a principios del XVI. Y aquí ya empezamos con la nebulosa ¿fueron los cantantes de los coros los que influenciaron a los alosneros, que luego volvieron a su tierra, o fue al revés?

  • Otra, de origen portugués
    • Con referencia al fado (hado o sino de las personas, del latín Fatum)
    • Hay otro vocablo portugués, esfandangado (un cante popular) que parece lo referencia.

  • Los bailes de candil (fuente, Wikipedia) fueron la confirmación, seguramente, de la popularización desde los salones de la alta sociedad. Llamados de candil, porque se celebraban por la tarde noche y se alumbraban con candiles.
    • Antigua fiesta campesina andaluza y extremeña de baile en la que, aunque participaba principalmente la juventud, se hacía presente ‘la comunidad’, bien a través de las madres de las chicas que acudían, o bien –en el caso de las fiestas importantes- a través de algún personaje principal del pueblo o barrio, que asumía el papel de autoridad para dirimir posibles conflictos de orden. A principios del siglo XVIII se empieza a denominar a estas fiestas populares, así como a su música y aires bailables, como FANDANGOS.

 

  • La teoría de la trashumancia 
    • Los pastores astur-galaicos y castellanos, en sus incursiones hacia el sur, iban, y luego volvían, dejando costumbres y también cantares, y luego volvían. Además, los judíos y los moriscos que no quisieron salir de la península, en nuestra tierra, se refugiaron muchos de ellos en la Sierra y en el Andévalo.

Explicación a la teoría de la trashumancia: Miguel Ángel Fernández Borrero (Conferencia pronunciada en Universidad de Córdoba, Aula de Flamenco el 07/03/2022.) -Sabrán perdonar los fallos técnicos del vídeo, tomado por un sistema casero- 

Sobre este asunto, Miguel Ángel Fernández Borrero nos dejó una joya insuperable de sus investigaciones en un cantar de la provincia de Ávila, el fandango rondeño de Candeleda.

En el audio se puede observar la similitud entre este fandango y uno del Alosno, de la Juana María. Dos preguntas, ¿Qué fue antes el de Candeleda o el de Alosno? ¿Por qué el fandango de Candeleda recoge en el audio una letra, muy choquera, con alusiones al mar?

 

Aquí un audio-video comparativo de los dos fandangos (Conferencia citada)

 

Hay algunas teorías más, pero creemos que hemos recogido las más importantes.  

 

La diseminación del fandango por toda la península

Lo que parece un hecho, es que, en la segunda mitad del siglo XVIII y la primera del XIX, se había extendido por toda España y, también, que no fue hasta el último tercio de este último siglo, que se empezó a aflamencar y a acercarse a las formas en que conocemos hoy el fandango de nuestra tierra.

En sus diversas vertientes regionales, y con sus características propias, conocemos “fandangos” en Galicia (la muñeira) en Aragón y Navarra (la jota) también en Castilla (las jotas de Covaleda -Soria- o de Segovia y el fandango de Candeleda -Ávila-) etc, en el Levante (todos los cantes llamados de Levante) y, en fin, por toda Andalucía. Donde más abundan, Almería (el taranto y la taranta) Jaén (la taranta de Linares, el fandango “cruzao” de Cazorla, el fandango del Castillo de Locubín) Córdoba (el fandango de Lucena y el zángano de Puente Genil) Málaga (malagueñas, verdiales, rondeñas, …) Granada (granaínas) y, como no, Huelva, donde podemos afirmar que se ha concentrado el mayor número de estilos y variantes de todo el conjunto de este palo.

 

Distribución del fandango en la provincia de Huelva

Señalamos aquí los pueblos de la provincia a los que se atribuye fandango propio.  

Marcamos Alosno con una flecha más gruesa por la cantidad de estilos diferentes surgidos en este pueblo. 

Huelva capital difiere un tanto del anterior y es, sobre todo, por la difusión que hicieron sus intérpretes más importantes (Antonio Rengel, Paco Isidro, Manuel Mora "el Comía", el Cojo de Huelva, Perlita de Huelva, el Peque de la Isla, Pepe Sanz ...) 

Moguer (Pepe Rebollo) y San Juan (Pepe la Nora) se pueden considerar dentro de la órbita de la capital. 

Una de las primeras, si no la primera, en difundir el fandango de Huelva fue la también moguereña Dolores Parrales ‘la Parrala’ (lo cantó en una actuación suya en París, en enero de 1880)  

También considerar en este sentido al alosnero Juan Mª Blanco. Su fandango, grabado en discos por Manuel Centeno en 1922, fue el primero grabado en estilo puramente alosnero (también ese año grabó Centeno otros con características alosneras de fandangos antiguos). 

Además de todo esto, la difusión del fandango alosnero fue un hecho a través de todos los alosneros que se distribuyeron por toda España para el cobro de los consumos. El impuesto de los consumos se fijó por ley en 1845.  No obstante, el auge de este impuesto fue ejercido a finales del XIX y principios del XX. Muchísimos alosneros salieron de Alosno para ejercer el cobro de los impuestos y con ellos también su fandango. También hubo emigración alosnera hasta a Terranova (el negocio del bacalao)

 

Dolores ‘la Parrala’ y el guitarrista Paco de Lucena, su marido. (Fuente Revista Litoral, nº 238; pág. 210)

 

  

Estilo atribuido a Dolores ‘la Parrala’ La Peña de Huelva lo grabó como Fandango de El Comía (Canta, Antonio Toscano, con la guitarra de Juan Carlos Romero.


 
 
Estilo atribuido, y la letra también, a Dolores ‘la Parrala’  Grabación de Manuel Torres, a la guitarra Miguel Borrul (hijo) Parece ser que este fandango "lo cogió" de El Comía al que se lo oyó en una fiesta del aristócrata Pepe Pérez de Guzmán en su finca de Lucena.

Hasta aquí la primera entrada de esta serie. Tendremos ocasión en las siguientes de dar alguna pincelada más sobre estos temas.

 

 

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LOS FANDANGOS: Encinasola.

 

Fuentes

    Bibliografía:

        Este es otro cantar. Edita, Caja Rural del Sur, 2002. Autor, Manuel Romero Jara.

        Huelva, tierra de fandangos. Edita, Fundación Cajasol, 2020. Autores, Luis Soler         Guevara, Manuel Romero Jara, Miguel A. Fernández Borrero y Faustino Núñez.

        Y sin Huelva no hay fandango. Edita, Centro de Estudios Andaluces de la Junta         de Andalucía, 2021. Autor, Juan Camacho Vilches.

        Manuel Torres. Edición de la Colección de Carlos Martín Ballester (nº 2) 2018.         Autores, Carlos Martín Ballester, Ramón Soler Díaz, Norberto Torres Cortés,            José Manuel Gamboa

    Wikipedia

        Varios apuntes.

    Prensa

        La Provincia (Huelva)

        Odiel (Huelva)

        Revista Litoral (Málaga)

    Youtube

        Varios.

 

 

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