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Entrevista a Francisco Luis García Delcán, Pregonero de la Romería 2022

Publicado por : elmorante.es a : martes, 5 de abril de 2022 0 comentarios
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Un nuevo abril vuelve cubrir de su aroma las calles de Calañas, aunque este mes será muy diferente, ya que el pueblo siente que al fin disfrutará de sus fiestas patronales, tras dos años de largo anhelo.

Hoy volvemos también a dar voz a la persona que nos regalará el pregón, que en tan solo 12 días, dará pie a este nuevo comienzo, en la ansiada romería. 

Francisco Luis García Delcán nació en la calle "El Barrio" de Calañas en 1966, hijo de una calañesa de la calle "La Fuente" y un padre minero, natural de La Zarza. Desde pequeño, creció en un seno familiar muy vinculado a la imagen de la Coronada, una devoción inculcada desde sus abuelos, que Francisco considera el pilar fundamental en su vida y en ese profundo sentimiento. 

Las circunstancias de la vida le llevan a residir fuera de Calañas, aunque eso no mengua para nada su devoción por su Patrona y su relación con el pueblo, manteniendo dicha comunión a través del arte, gracias a sus aportaciones en una de sus aficiones como es la pintura, de la música como antiguo miembro en la coral polifónica, o pertenendiendo también a la Hermandad de Padre Jesús Cautivo y María Santísima en su Amargura, en la que también tuvo el honor de ser pregonero, además de ser el último exaltador de la galana, en el año 2019. 

Credenciales más que suficientes para hacer presagiar, que el próximo día 17 de abril, Calañas disfrutará de un pregón cargado de emociones y solemnidad.


¿Cómo recibiste la gran noticia de que eras pregonero y cuales fueron tus sensaciones?

 En la tarde del pasado 13 de noviembre, recibí una llamada de la Hermandad, en la que solicitaban mi presencia en la casa de regalos (en la calleja), y allí acudí junto a mi mujer María José.

Al llegar, tuvimos un rato de conversación con alguno de los miembros del Cabildo y entre otras cosas, hablamos de la ilusión que teníamos todos para este año, en el que por fin, parecía que la dichosa pandemia nos dejaría celebrar las fiestas de nuestra Patrona.

A continuación y sabiendo de mi afición a la pintura, me comentaron la posibilidad de realizar un cartel para la Virgen, (pero sin definir claramente sus intenciones), todo sonó un poco extraño, pero yo accedí sin pensar mucho, fue entonces, cuando me pasaron un escrito, en el que en teoría, se me comunicaba la elección como cartelista, y al darle lectura, me encontré con el nombramiento de Pregonero para estas próximas fiestas en Honor y Gloria de nuestra Santísima Virgen de la Coronada. (Lo del cartel, solo había sido una mentira piadosa). 

La reacción fue indescriptible, mi mujer lloraba y yo sin palabras, solo sabía repetir: “por Dios, mi madre cuando se entere”. Tras un ratito para asimilar tanta emoción, evidentemente acepté y aquí estamos, para lo que la Virgen de la Coronada quiera de mí. Yo he puesto el corazón en cada palabra escrita y sé que Ella estará a mi lado, acompañándome en todos los momentos de este camino único e irrepetible que me ha regalado la vida, y que podré disfrutar con toda la gente que quiero.

 


¿Qué sientes cuando estás frente a la Virgen de la Coronada?

Estar frente a Ella, es sentir un descanso en nuestra mente al dejarse llevar por su silencio de ermita. Estar frente a Ella, es sentir a tu familia, a los que puedes besar y abrazar y a los que ya se marcharon para siempre, pero siguen viviendo en nuestros recuerdos. Estar frente a Ella, es sentir la devoción, es sentir la tradición y es sentir su bendición, al percibir en su mirada esa respuesta anhelada.

A pesar de que cada día es especial y tiene su propio sentido, si tuvieras que quedarte con uno de los tres días grandes de estas fiestas, como son la Traída, Procesión y Llevada, ¿Cuál elegirías?

 Los tres son únicos e intensos de vivir, pero como me pedís una respuesta, os diría: que hace 30 años hubiera elegido el día de la Traída, pero que con el tiempo, he aprendido a saborear el encanto y la solemnidad del Domingo de Procesión y por tanto, sin duda ninguna, me quedo con este último como día grande, en el que la Virgen brilla con todo su esplendor y en total plenitud, paseada por los hombros de sus hijos Costaleros, al calor de un pueblo que la espera, la acompaña y la venera.

 ¿Cómo has vivido estos dos últimos años, los días señalados de la Romería, por desgracia cancelada a causa de la pandemia? 

Muy emocionado, pues recordar desde la distancia esos momentos que todos esperamos cada mes de abril, y no poder vivirlos con normalidad, fue duro de asimilar. Pero quizás, también estuve más cerca de Ella que nunca, pues imploré su protección en muchos instantes, en los que nada de lo que estaba ocurriendo, parecía tener sentido. 

¿Cómo te ha resultado el proceso para elaborar tu pregón?

La elaboración del pregón, ha pasado por varias etapas imposibles de controlar, pues según el día y el estado de ánimo, he experimentado: Inquietud, ansiedad, euforia y un sinfín de emociones, que han terminado con la satisfacción de haber podido plasmar sobre un papel, todo aquello que estaba en mi interior de una forma latente y que siempre deseé expresar.

 ¿Podrías contarnos algunas anécdotas y vivencias, de algunas de las Romerías de tu niñez o juventud?

 De la niñez muy pocas, pues por motivos familiares, en esos años de infancia, mis romerías se limitaron a esperarla en el pueblo junto a mi madre, mi hermano y mis abuelos. (Esa podría ser quizás, la anécdota de los primeros años).

 Sin embargo en la juventud, sí viví la romería con esos amigos y amigas, donde encontré el amor de mi vida, mi mujer Maria José. En ese tiempo, cada paso fue la aventura, la anécdota, y la vivencia del momento.

 


 Fueron años donde la alegría del camino, se contagió de la edad. Donde poner el pañuelo con tu nombre para el paso en la llevada, era lo más importante para nosotros ¡tanto!, que tras visita diaria a la Virgen de la Coronada en su Altar, nos asegurábamos todos los días, de que seguía ahí, anudado a su varal.

 Recuerdo las paradas del camino con mi familia y el cante por sevillanas, (esas bíblicas de siempre). Recuerdo el vinillo de la Virgen que preparaba mi tío Julián, (del que aprendí la mezcla perfecta) y esos fandangos “sentíos” de mi tío Rodrigo junto a sus buenos amigos, y también recuerdo, esos olores y esos sabores de primavera, que impregnaron mis sentimientos y que me acompañarán hasta el final de mis sueños.

¿Qué es aquello que cambiarías, si pudieras, para mejorar el desarrollo de la Romería de la Virgen de la Coronada, y que es lo que crees que nunca se debería alterar?

 ¿Qué cambiaría?, sé que es una utopía, pero pensemos en una romería libre de coches, donde el camino pudiera disfrutarse en toda su plenitud y sin tener que estar sujeto a un tráfico, que con los tiempos, ha modificado la forma de vivir esas paradas de antaño.

En cuanto a lo que nunca debería alterarse, sino más bien afianzarse, sería la tradición de sus cantos y sus plegarias de siempre, junto a esos momentos de alabanzas que se viven junto a Ella, cargados de sentimientos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


 

 

 

 

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