Más allá del Ébola a día de hoy hay diferentes enfermedades que podemos tachar como olvidadas, dada su escasa repercusión en los medios de comunicación. Estas enfermedades aunque aisladas y con escaso impacto en occidente, son un potencial riesgo para futuras epidemias como la del Ébola.
La mayoría de ellas se deben a la eliminación de grandes extensiones de zonas naturales, lo cual provoca la migración a otras especies de ciertos virus. Algunos de ellos apenas son dañinos para los seres humanos provocando simples resfriados o alergias. Sin embargo, en otros casos pueden provocar efectos muy graves o incluso la muerte.
Es importante, subrayar la importancia de la destrucción de los hábitats como causa fundamental para el desarrollo de estas nuevas enfermedades, ya que de otro modo el salto a otras especies por parte de los virus es muy poco probable.
| Virus al microscopio óptico de alta resolución. |
Entre estas enfermedades está el virus Marburg que provoca una fiebre hemorrágica grave con una tasa de mortalidad entre el 24 y 88 %. Es causada por el salto del virus desde murciélagos frugívoros (Rousettus aegypti) al hombre. Los últimos casos se han dado en Uganda, y su forma de transmisión es similar a la del Ébola. No existe vacuna.
Una enfermedad casi extinta pero que aún se da endémicamente en tres países Nigeria, Afganistán y Pakistán es la polio, o poliomielitis. Se trata de enfermedad que afecta a niños menores a cinco años y que daña al sistema nervioso, pudiendo causar parálisis en cuestión de horas. Su tasa de mortalidad es del 10% y la vía de contagio el agua o alimentos contaminados. La OMS (Organización Mundial de la Salud) advierte que aunque parezca controlada mientras haya un solo caso, existe el riesgo de epidemia (200.000 niños podrían ser afectados).
La fiebre amarilla, aunque se cuenta con una vacuna eficaz, sigue provocando 30.000 muertes y 200.000 casos cada año, según la OMS. Su tasa de mortalidad es del 50%, provocando fuertes hemorragias e ictericia (piel amarillenta), de ahí su nombre. Es causada por mosquitos infectados y su área de expansión es África.
Fiebre aviar, originaria de Asia se transmite por el contacto con aves contagiadas, puede producir neumonia y fiebre muy alta. Es una enfermedad de la que hay muy poca información, por lo que es necesaria su investigación, tanto para conocer completamente sus efectos como su cura, ya que se trata de un virus con alta capacidad mutagénica.
Otra enfermedad de la que se desconoce la cura es el síndrome respiratorio agudo y grave, SARS, es una extraña enfermedad descrita en 2003 en Asia, y que ya cuanta con numerosos casos en todo el mundo. Provoca fuertes neumonías e incluso la muerte. La fuente de infección son pequeños mamíferos y la causa puede estar relacionada con la deforestación. Se transmite por el aire, por lo que es altamente contagiosa.
Enterovirus D-68 es otro caso extraño con una sintomatología parecida a los casos descritos anteriormente. Endémico de Estados Unidos afecta fundamentalmente a niños y adolescentes, ya se han descrito más de 1000 casos, algunos de ellos finalizaron con el fallecimiento del enfermo.
En todos estos casos se hace imprescindible la implicación de los organismos publicos para su investigación y para dar ayuda médica y material, ya que en muchos casos dichas enfermedades son evitables con buenas condiciones de higiene y salubridad.
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